Saltar al contenido
HISTORIAE

¿Para qué sirve la Historia?

Artículo de opinión «¿Para qué sirve la Historia?» publicado por mí en la web de La Trova el día 6/12/2018. Puedes acceder al artículo en su versión original a través de este enlace.

¿Para qué sirve la Historia? ¿Qué hacen los historiadores? ¿Por qué no te metes en una carrera útil? ¿Para qué ser historiador si todas las fechas están en Internet? ¿Qué puede hacer un historiador sabiendo la vida de gente muerta del pasado frente a un médico/ingeniero/científico que salva/mejora la vida de la gente del presente?

¿Para qué sirve la Historia?

Desgraciadamente, muchas más veces de las que me gustaría tener que reconocer me he encontrado con gente y amigos que me hacen éstas y muchas otras preguntas que intentan cuestionar el sentido que tiene dedicarte profesionalmente a una disciplina como la Historia. Esto no deja de ser cuanto menos “curioso” si tenemos en cuenta que buena parte de las series (The Crown, Vikings, Peaky Blinders, El ministerio del tiempo, Downton Abbey, Mad Men, Narcos…), películas (Dunkerque, 1917, El instante más oscuro, Jackie, Figuras ocultas, El puente de los espías, Spotlight, Lincoln…) y novelas (Yo, JuliaUna columna de fuego, Los pacientes del doctor García, Patria, La legión perdida, La catedral del mar, Los señores del tiempo, Sapiens, Las hijas del capitán, Fariña…) más seguidas y premiadas de los últimos tiempos están basadas o inspiradas en hechos históricos. Y aun así, la Historia como conocimiento imprescindible que toda sociedad debe cultivar está totalmente infravalorada.

El que no conoce la Historia está condenado a repetirla” – dice la cita célebre. Y pocas veces un dicho popular ha tenido más razón. Hace no tanto el mundo pudo contemplar como Jair Bolsonaro, el candidato ultraderechista, machista, homófobo y racista del Partido Social Liberal de Brasil, ganaba por amplia mayoría la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del país, que es la sexta potencia económica mundial. Y ahora, en plena pandemia de coronavirus, siento una gran furia cuando veo a los grupos negacionistas. Ante esta situación, cabe preguntarse cuántos de esos conspiranoicos sabrán la de vidas que han salvado y salvan las vacunas, y cuantos de esos votantes sabrán, por ejemplo, lo que Brasil vivió durante más de dos décadas en una dictadura militar ultraderechista que acabó hace poco más de treinta años, y que se caracterizó por las masivas violaciones de derechos humanos y la total ausencia de libertad ideológica y de prensa.

"La libertad guiando al pueblo", de Eugène Delacroix
«La libertad guiando al pueblo», de Eugène Delacroix

Y no estamos hablando solo de Sudamérica. ¿Cómo se puede comprender que una tierra forjada y desarrollada sobre la inmigración como Estados Unidos haya tenido de presidente a un organismo unicelular como Donald Trump? Europa, que no hace tanto perdió las vidas de decenas de millones de personas para acabar con los fascismos en la Segunda Guerra Mundial, ahora tiene que ver cómo en al menos una quincena de sus países hay representación parlamentaria o gobiernos con partidos ultraderechistas en el poder. ¿Cómo se explica que la Alemania que sufrió a Adolf Hitler ahora tenga que ver como el partido neonazi NPD tiene representación en el Parlamento Europeo, o que el partido Amanecer Dorado, incluso usando un símbolo muy similar a la esvástica nazi, sea tercera fuerza política en Grecia? Y de los extremismos ideológicos de España, a izquierda y derecha, mejor no hablemos… Sin duda, esto se debe a una gran cantidad de factores sociológicos que convergen entre sí y que se relacionan con la situación económica y política de la última década, pero el que me gustaría destacar hoy aquí es el poco o nulo conocimiento histórico de la ciudadanía.

Si quieres escuchar una versión ampliada de este artículo puedes escuchar este podcast dándole ya mismo al play.

Tampoco es que este sea un problema reciente que ha desarrollado la sociedad, pero sí es cierto que es especialmente sangrante en la actualidad. Vivimos en un mundo en el que tenemos toda la información al alcance de nuestra mano en Internet, pero, paradójicamente, estamos más desinformados que nunca. Esto no significa que los niños y adolescentes de hoy sean menos inteligentes o estén peor educados que los de hace un par de décadas, pero sí implica que no están siendo preparados para diferenciar y valorar los tipos y calidades de la información que tratan a diario. Más allá de esto, quizás lo peor de todo es que son las propias instituciones de gobierno, tanto de izquierdas como de derechas, las que muchas veces fomentan este panorama de desinformación. Depende del político y del partido al que le preguntes, determinados hechos y figuras históricas pueden ser radicalmente diferentes. Lo que olvidan estos personajes públicos es que la investigación e interpretación de la Historia debe pretender ser objetiva, neutral y apartidista. Y ahí es donde entra el historiador.

La Alhambra de Granada
La Alhambra de Granada

En un sentido global, lo más importante que aporta el conocimiento histórico a una persona es perspectiva. Si una persona conoce y entiende el desarrollo histórico de una civilización que pudo estar a pocos o miles de kilómetros de donde vive, es poco probable que llegue a ser racista, xenófoba o supremacista, porque comprenderá que su propia civilización no es la única que puede llegar a lograr grandes gestas. Conocer la Historia, la verdadera Historia, no ese fallido ejercicio memorístico que muchas veces se da en los institutos, nos hace ser tolerantes, comprensivos y empáticos, nos hace ponernos en la piel de las personas que tuvieron una familia como nosotros, unas relaciones sociales como nosotros y una serie de problemas diarios como nosotros. En otras palabras, ¿cómo alguien puede generalizar y llamar bárbaros y terroristas a todos los musulmanes después de ver, solo en la península Ibérica, colosales joyas del Arte como la Alhambra de Granada, la Mezquita de Córdoba o Medina Azahara? ¿Cómo alguien con un mínimo de humanidad puede ser antisemita después de ser conocedor del alcance de los genocidios que los judíos llevan sufriendo desde hace siglos y siglos?

Generalmente, el motivo por el que muchas personas cometen el error de pensar que el estudio de la Historia es inútil es porque el producto de su estudio no es tan tangible como el de otras disciplinas. Efectivamente, el médico salva vidas y el ingeniero las mejora para hacerlas más cómodas y sencillas, pero solo oficios como el de historiador son capaces de hacer que el carácter de la sociedad en sí sea mejor. El bombero podrá salvar a muchas personas del fuego, pero no puede tratar de evitar que esa persona acabe votando a partidos extremistas y populistas, como sí podría llegar a hacer un divulgador histórico explicando los horrores de la Unión Soviética, por ejemplo. Incluso este concepto de la intangibilidad de la Historia es cuestionable, ya que ésta impregna todos los aspectos de nuestra vida; nuestras costumbres, fiestas, tradiciones, gastronomía, y en general, nuestra forma de vivir la vida, las hemos heredado de nuestro pasado. Saber de dónde venimos nos hace comprender qué somos y en qué podemos llegar a convertirnos.

"La Verdad, el Tiempo y la Historia", de Francisco de Goya
«La Verdad, el Tiempo y la Historia», de Francisco de Goya

Asimismo, el conocimiento histórico es uno de los saberes que ofrece a su poseedor mayor sentido común. Evidentemente, no hace falta saber de Historia para poder tenerlo y saber discernir lo bueno de lo malo y lo razonable de lo que no lo es. Sin embargo, este tipo de conocimientos es de los que permiten mayor crecimiento personal en campos tan importantes como el pensamiento crítico y la reflexión. Y esto en una sociedad que vota en las elecciones con el corazón y los ojos, y no con la cabeza, a la candidatura más guapa, más joven, más enérgica o más demagógica, es muy importante. En otras palabras, llegar a asomarnos a la Historia nos hace ser menos sugestionables por los medios de comunicación y políticos de turno, y por tanto, nos hace más libres de decidir cómo queremos ser, qué queremos pensar, y a quién queremos creer, sin tener que echarle la culpa de todos nuestros problemas a los inmigrantes, millonarios, musulmanes, judíos, empresarios, negros, colectivos LGTB y demás chivos expiatorios.

En conclusión, la Historia es mucho más que saber que en el año 1492 Cristóbal Colón descubrió América. La Historia es conocer y comprender todos los avances científicos, culturales, económicos y sociales que permitieron que justo en el año 1492, y no en cualquier otro año, década o siglo, una serie de hombres capitaneados por Cristóbal Colón tuviera la capacidad técnica de poder cruzar el océano Atlántico y llegar a poner un pie en América. Si te gustan algunas o todas las series, películas y novelas que se mencionaron al principio es porque has descubierto la gran verdad oculta detrás del prejuicio social dominante: la Historia es apasionante, y cuando la conocemos en mayúsculas nos engancha y maravilla a partes iguales.

Artículo de opinión «¿Para qué sirve la Historia?» publicado por mí en la web de La Trova el día 6/12/2018. Puedes acceder al artículo en su versión original a través de este enlace.

Para saber más

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable: Óscar Hernández Abreu.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Sered.net que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Comentarios (17)

El concepto de historia tal como ha sido aquí expuesto es demasiado superficial respecto al contenido de la misma. Aun cuando la Historia no sea considerada todavía una ciencia, ante todo y primordialmente es una ciencia social. Para efecto, habrá primero que dilucidar respecto a la memoria de fechas y enlistados de personajes, naciones, sociedades, etc. por oposición a lo que la misma en su contenido abarca. La Historia no ha sido considerada todavía una ciencia social puesto que se ha visto despojada o privada de su «aforismo» científico de servir como base para el descubrimiento de leyes sociales. Sin embargo, la Historia cumple leyes que si su desarrollo no consiente para volver a reproducir sus acontecimientos materiales, tal como ocurre por medio de la experimentación dentro de las ciencia naturales, en cambio, por abstracción, permite constatar las bases materiales en que la misma tiene cumplimiento. De manera, que ‘mutatis mutandis’ en tanto es posible conseguir estas apreciaciones deductivas o inductivas sobre la reproducción de su acontecimiento (experimentación mental).
De tomarse en cuenta, como referencia, las breves notas apuntadas sobre el papel de la Historia como ciencia social, bien podríamos atisbar el enorme acervo de conocimientos que la misma alcanzaría aportar sobre el conocimeinto de nuestras sociedades y de su evolución (estudios comparativos).
Al respecto, bien vale un comentario adicional. Por ejemplo, el renombrado historiador Sr. Francis Fucuyama, haciendo prevalecer su miopía respecto al papel aportado por la Historia esto es, su fin (como propósito) y no en cuanto final de la misma, puesto que no pareciera tener nunca final como no imaginamos que consiga tener algún día final la materia en el universo, dedujo que su fin había llegado al prevalecer el sistema capitalista (modo de producción histórico) a la caída del socialismo real (1989). No era capaz de contemplar que en cuanto objetivo, la historia nos muestra, además de los cumplimientos por analogía o abstracción, las tendencias intrínsecas de la misma. Dondequiera, no le era posible ver a este ilustre historiador que si las tendencias históricas han consegido mostrar que la opresión de la sociedad a manos de una clase dominante que es propietaria del excedente impone consigo la ideología dominante, por avatares o condiciones coyunturales consigan existir sucesos que como altos y bajos cumplan a la supresión tras sí de formas más altas de desarrollo (categorías) en un proceso demasiado prolongado para contemplar a un medio plazo un cumplimiento definitivo. Por cierto, una subversión que el ilustre Proudhom conseguía imaginar cuando no veía que las categorías históricas suelen acompañarse de un suceso que se adelanta a su época. Cuandoquiera, que no permiten, menester a sus propias condiciones materiales del momento, alcanzar a desarrollarse posteriormente en mayor capacidad de la que en ciernes le ocupara.

Responder

La historia no tiene preferencias politicas, es algo que ya acontecio, no es una cosa hechiza, no tiene faccion ni objetivos pragmaticos, Lo que si es una pena es que la hayan deformado y enlodado tanto, es por eso que confunde y se utiliza para someter mentes y engañar masas enteras, a veces es tan facciosa que crea esenarios turbios. El comenttario al pie del articulo satanisa movimienntos sociales y los anticipa como si fueran profeticos.Lo que si puedo concluir es que quien lo escribio tiene desprecio por algo acontecido que no se puede cambiar, no hay que prejusgar lo que sucede hoy en el mundo, ya sera historia en su momento, y por ultimo ese acerrimo odio a los movimientos de derecha (que por cierto son calificativos de los liberales rabiosos que se autonombran izquierda) se apuntan como enemigos de todo lo que no va con sus ideas pero si puedo y con toda señalar que este mundo podrido que ahora se vive (sin valores eticos ni religiosos) se lo debemos a esa izquierda rampante que se desliza como serpiente a travez de la historia

Responder

muy bueno tu comentario, pero que me decis de las guerras que el que gana la describe y escribe como el quiere cambiando hechos y forma de decir las cosas… o por ejemplo todo lo que oculto la iglesia y la religion cristina de historia y cambia los hechos y los oculto para que se piense de otra manera y que ellos esten puestos como los heroes… o mas cerca todo lo que hace estados unidos y los paises civilizados para olcultar hechos y cosas tanto buenas y malas que pasan para que todo sea correcto desde su forma de ser hacia el mundo… te falta leer mas a vos y dejar de criticar de forma cerrado al anterior comentario de domingo h

Responder

Deje de leeer el articulo completo revisando lo escrito……se nota el caracter politico de izquierdas de quien lo ha escrito. …en ningun momento nombra a Stalin..Fidel Castro o Lenin….esto en historia se explicaria facilmente….frase popular ..y quien escribe la historia??
Que pena…

Responder

Cada ser Humano, crea una historia, procedemos de un árbol genealógico que cuenta con su propia historia y vivimos inmersos en un lugar que cuenta con su propia historia, sea en el tiempo o en los hechos. Por tal razón, el que hace caso omiso de los acontecimientos humanos, tiende a su sesgar su realidad. La historia es:fascinante, hermosa, triste, animada, real, intolerante, ridícula, graciosa, etc. Guarda todas las pinceladas del pasado, del presente y el porvenir de los errores y aciertos humanos.

Responder

Es tan importante conocer la historia…es conocer la verdad de lo acontecido, de la esencia misma de la vida, y es tan didáctica y ejemplar para no cometer errores o para imitar virtudes…pero, esa historia a veces es imperfecta, porque a veces no evidencia el mundo interior de las personas, o no aporta los detalles importantes que fueron componentes importantes de un hecho o una situación…de ahí es de suma relevancia seguir el consejo bíblico: escuchar, analizarlo todo y retener lo bueno.

Responder

No suelo dejar comentarios, pero tu escrito me ha parecido magnífico. Enhorabuena. Saludos!!

Responder

Historia para que? Entiendo que la historia no es un recetario de los hechos historicos que nos sirvan de modelo para no cometer los errores pasados.es una ciencia social,que tiene como finalidad formar cuidadanos criticos que sean y se sientan protagonistas de su realidad para poder tranformarla. Es una ciencia que nos lleva a mirar nuevamente al pasadoy ver cuales fueron las intensionalodidades de aquellos acontecimientos y asi pensar si hubieron otros futuros posibles…y deconstruir la historia tradicional de que somos una nacion blanca descendida de los barcos.

Responder

Me gustó mucho este artículo. Me gusta leer sobre historia.

Responder

Muy buen artículo! Conocer la historia es imprescindible. Nos ayuda a comprender muchos de los conflictos que se dan en el mundo, saber de donde vienen y formarnos una visión crítica de los hechos. Nos permite conocer nuestro pasado, nuestras raíces, conocer más a fondo nuestra cultura y la de los que nos rodean… saber de donde venimos y porqué somos como somos, desentrañar los motivos que nos unen y, en ocasiones, aquellos que nos separan… Como bien dices, nos aporta empatía y perspectiva, pero además despierta la curiosidad, entretiene, divierte y emociona.

Responder

muy pero muy emocionante e importante para la cultura

Responder

Deje de leeer el articulo completo revisando lo escrito……se nota el caracter politico de izquierdas de quien lo ha escrito. …en ningun momento nombra a Stalin..Fidel Castro o Lenin….esto en historia se explicaria facilmente….frase popular ..y quien escribe la historia??
Que pena…

Responder

La historia es muy importante y sirve para interpretar una realidad, para conocer la verdad, para planificar y organizar un ideal. ES UN CONOCIMIENTO DE NOSOTROS MISMOS, NO SÓLO COMO PERSONA TAMBIÉN DENTRO DE UNA SOCIEDAD. SIRVE PARA PLASMAR EL IDEAL DE PATRIA Y PARA GENERAR UN ESPÍRITU.

Responder

No cabe duda que la HISTORIA es muy importante, pero a veces se consigna en ella hechos que no son cierto. Por ejemplo: Cristóbal Colón no descubrió América. Ya existía un mapa del Continente Americano, el Mapa de Piri Reis. El mito de los niños héroes, etc.

Responder

Si la historia del mundo pudiera hablar libremente diría:
«Harto estoy de todos vosotros, de vuestras ideas y de vuestras
verdades, de vuestras razones e imposiciones, de vuestras luchas
de razas, y de intereses, como de vuestras cadenas al hombre y
mujer. Harto estoy de que mis hojas (páginas) estén empapadas
de sangre, como harto estoy de que me desprecien por lo que
cuento y enseño, y que nadie se interesa por aprender nada. Harto
de que mis enseñanzas caigan en saco roto, de que no hayan servido para nada. De que la gente no quiera saber que mi principal
misión es acabar con la destrucción y la barbarie. Que esa y esta
gente que puso sus ojos sobre mí, no vuelva a repetir los mismos errores, esta es mi función, pero gracias a vuestros hechos
parezco más el libro de los muertos que el de la historia». Esto y
mucho más ¡nos diría la historia si pudiera hablar!

Responder

Saludos a todas y a todos.
La Historia es MUY importante, porque así podemos comprender el ORIGEN DE NUESTRAS TRADICIONES.
En el caso de “ La Historia del Origen del Mariachi”, sólo se llega a la verdad si conocemos primero la historia de mi tribu “ COCOLLAN, CON SU LENGUA COCA”.
Las personas que escribieron la vida y obra de nuestros ancestros nos permiten a nosotros y a las generaciones futuras conocer “EL VERDADERO ORIGEN DEL MARI IA CHI”, en el hoy Cocula Jalisco México, lo escrito por todas y todos en su tiempo ahora ES la información VERÍDICA para mostrar al universo la verdad: “ EL ORIGEN DEL MARIACHI ESTÁ EN SU CUNA MUNDIAL Y UNIVERSAL QUE ES COCULA JALISCO MÉXICO”. Muchas gracias por leerme.

Responder

La historia nos permites conocer entender el pasado y presente que vivimos nos ayudas a construir nuestro futuro . Tener conocimiento de que significado tiene la historia es muy bueno porque adquirimos conocimientos importantes , conocer de nuestras culturas y del mundo . Me gusto mucho leer sobre la historia nos ayuda a tener más conocimiento de ella .

Responder